solitaria carretera cuando de pronto, su auto comenzó a detenerse hasta
quedar estático. El hombre bajó, lo revisó, trató de averiguar que era lo
que
tenía. Pensaba que pronto podría encontrar que era lo que tenía
el auto pues hacía muchos años que lo conducía, sin embargo después de
mucho rato se dió cuenta de que no encontraba el daño del motor. En ese
momento apareció otro auto, del cual bajó un hombre a ofrecerle ayuda.
El dueño del primer auto dijo: - Mira, este es mi auto de toda
la vida, lo conozco como la palma de mi mano. No creo que tu sin ser el
dueño puedas hacer algo. El otro hombre insistió con una cierta sonrisa,
hasta que finalmente el primer hombre dijo:
- Bueno, haz el intento pero no creo que puedas pues este es MI
auto.
El segundo hombre hechó manos a la obra y en pocos minutos
encontró el daño que tenía el auto y lo pudo arrancar.
El primer hombre quedó atónito y preguntó:
- ¿Como pudiste arreglar el auto si es MI auto?
El segundo hombre contestó:
- Verás, mi nombre es Felix Wankel....yo inventé el motor
rotatorio que usa tu auto!
Cuantas veces le decimos a Dios: esta es MI vida, este es MI
destino, esta es MI casa. Al enfrentarnos a los problemas y a los días
difíciles creemos que nadie nos podrá ayudar pues "es MI vida".
Solo aquel que es el autor de la vida y el amor, puede ayudarte
cuando te quedes tirado en la carretera de la vida.
Hebreos 13:6 "De tal manera que digamos confiadamente: El Señor
es mi ayudador; no temeré Lo que me hará el hombre."
-LoReNa-
No hay comentarios:
Publicar un comentario